30/7/09

Mandale saludos a Evo

El micro desde Sucre viajó 12 horas sin parar NI UNA SOLA VEZ, vejigas gritando y piernas apachurradas. Llegamos a La Paz bien temprano a la mañana, el primer vistazo es impresionante: casitas, casitas y casitas. El bus bajó desde "el alto" haciendo lo que parecían (aunque seguro no eran) anillos concéntricos, adentrándose cada vez más en la ciudad. Notamos de pronto que viajábamos por las calles rodeados por un mar de mini-combis, tanto que, en un momento, teníamos algo así como sesenta alrededor.
Llegadas a la terminal, dos señoras con una seriedad que metía miedo, miembros de la "policía turística", nos tomaron los datos y nos eligieron un taxi, del cual también apuntaron la patente (para dejarnos bien tranquilas de que ahí nunca pasa nada). Listos los trámites, arrancamos para un hostel que un pibe que estaba medio bueno le había recomendado a Chan en un locutorio de Uyuni (otra tranquilidad).
El lugar era una mezcla de la vecindad del Chavo con la cárcel de Caseros y estaba en construcción. El gallego que atendía el boliche, encapuchado y muy parecido a Cuasimodo, nos dijo que nuestra habitación iba a tardar un rato y nos mandó a pasear. Armadas con un mapa, salimos a buscar un desayuno cercano para no caminar tanto, rumbeando para la plaza Murillo, donde correteamos palomas y sacamos fotos.
De la nada un tumulto se armó en uno de los laterales de la plaza ¡Vamos a ver qué pasa! Un auto con vidrios ahumados se acercaba a un edificio de apariencia jerárquica y unos soldaditos muy simpáticos en la puerta.
¿Será posible? Nah… ¿o sí?
Y en ese momento, la confirmación: alguien en el gentío grita: ¡Bien Evo!
ERA ÉL, lo vimos, en La Paz, una mañana fría, de sorpresa, se cruzó por nuestro camino, Evo Morales.
Y así como vino, pegó un saltito para trepar los escalones, y desapareció.

Para recordar ese gran momento: el registro visual que tomamos del hecho. El video tiene el pequeño defecto de que el sonido está levemente desfasado, pero creo que transmite bien el frenesí y la emoción del momento cuando fue tomado.

3 comentarios:

chanet dijo...

Naaaaaaaaa...cuál será el chiste que estoy haciendo?!
El hostel fue tb recomendado por el Boli, por el temita este de que bueno ahí estaba todo más que bien con bueno cuando estás en otro país y no sabes bien qué onda, donde se puede, bueno, se entiende.
Muy emocionante ese momento como todo en la paz: risitas, los lustra-botas de quebracho, el mercado loco, el alto, el viaje en sí.

bar dijo...

Termina la frase con: "normal, tranquilo" . Pero blogger no me toma el final por lo del corrimiento auditivo, ¡que lo tiró!
Sí, La Paz, una masa.

Pataza dijo...

El lustrabotas que estaba enamorado de chaann.
tan bien estaba todo con todo en ese hostel que el mismisimo cuasimodo nos dijo: "y ahi arriba tienen una terracita por si quieren.. tomar sol..."
qué bueno La Paz y su mercado de brujerías...